18 jun 2008

Despachos

Cualquiera que lea (y que sepa) ese título me preguntaría "vas a hablar de las retenciones no?" La respuesta es un contundente "No". También, últimamente veo que la gente suele leer rápido (digo "leer rápido" para no decir que lee para el culo pero como ven y pueden corroborar, muy bien no suena) y por lo tanto no termina de comprender las oraciones y líneas que tiene la oportunidad de registrar en su retina (?) con lo cual, no estoy diciendo "Despechos", ergo, no voy a hablar sobre ninguna historia de amor no correspondido y/o similares, better luck next time.

La verdad, la aclaración anterior no se para qué la hice, ya que no me entero salvo por el Sir o quizás también Alejandro de lo que puede pensar alguien en relación a lo que escribo y finalmente, no se para qué puse "Despachos" como título, no se qué habré querido poner en realidad.

Todas esas dudas existenciales se plasman en una sola conclusión, "qué carajo era lo que quería decir?" Creo recordarlo, entre tantos papeles, números, abrochadoras (?) y lapiceras Pilot (?) puede que haya una pista que provoque en algún sector de mi cerebro que haga recordar lo que quería expresar, ya no busco sutileza o perspicacia, sólo busco la respuesta a esa exasperante pregunta.

Por suerte, una taza de café revivió el fuego interior de mi aparentemente dura corteza cerebral. Dicho sea de paso, la taza de café debe ser la primera que tengo el agrado de tomar desde hace algunos años, muy irónico teniendo en cuenta que mi viejo trabaja con el café. El fuego interior era tan intenso que tuve que salir a la calle a enfriar mi cabeza (sí, ya se, esta última frase es una mierda, quizás como todas las anteriores, pero todo eso del "fuego interior", "intensidad", vamos, no sean agretas y acepten que puede sonar joya en un principio, después sí, es una mierda).

La calle sólo me sirvió para comprender que no le puedo hacer frente al frío ni 3 minutos vestido de "elegante sport", sin embargo, la pista cobraba existencia. Cuál era la pista? La pista estaba en la música, en LA música, es decir, en Los Beatles... una vez más.

No soy de soñar, generalmente no me acuerdo de los sueños sin embargo recuerdo bien el de hace unos días, fue bien simple, me vi volando por los cielos y de repente, agarrando una Rickenbacker y tocando en una terraza una canción en particular... ahí va.




"Feliz cumpleaños Paul"

2 comentarios:

SirThomas dijo...

Jaja, vamos carajo !!!

Despachos a mi me suena a "Oficinas" igual (?). En ningún momento lo pude relacionar con las retenciones.

Feliz cumple a Paul, ni me enteré che... se ve que como ya pasó los 64 no hicieron mucho barullo al respecto. Siempre estará ceasar para recodarlo. Como no hacerlo despues de que te dedicaran aquella canción :P.

Salutes.

César dijo...

Es cierto, oficina también es otra de las opciones, muy "NBA" cuando un jugador está "en su despacho", no lo recordé en ese momento.

Vengo escuchando bastante a Paul últimamente, un groso de verdad.

Un abrazo!